Mañana
es el lazo
que hoy atas a tu pie derecho.
Con él
quieres anudar
los ciento volando
y cualquier escalada
a esta parte del plano terrenal
inclinado,
apuntando al infinito.
Mañana
vive con la esperanza
de la armonía armada,
de la felicidad cosechada,
de la tormenta perfecta,
de la explosión solar.
Mañana,
día siguiente,
de un hoy urdidor.
Anuncios
Pingback: Día siguiente—SALTO AL REVERSO – Emociones encadenadas