A Alejandra Pizarnik
Hablan de tus demonios y no
ponen cara a tu espíritu.
Hablan de tus males y no se apenan
al hacerte princesa de la miseria.
Hablan de tu cárcel, pero no de
lo sobrenatural de tu canto libre.
Hablan hablan hablan hablan
y dicen tu nombre en vano.
La angustia reina para todos,
a todos se acercan los demonios
y todos nos hacemos jaula, alguna vez.
Hablan hablan hablan hablan
pero regresas cuando pronuncio
tu nombre, Alejandra. Eres canto
en mi invocación y pájaro que migra
y cría desde mi norte hasta mi sur.
Precioso, mucho
Me gustaLe gusta a 1 persona
Gracias.
Mi admiración por ella es muy grande.
Un saludo.
Me gustaMe gusta
Hermosas palabras… Saludos!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Gracias, Eikon.
Saludos.
Me gustaMe gusta
Precioso
Me gustaLe gusta a 1 persona
Muchas gracias, Marina.
Un abrazo.
Me gustaLe gusta a 1 persona