Un café sobre un café sobre un café
sobre otro sobre otro sobre otro
y un cigarro se consume despacito
y me quema los dedos y los labios y los ojos.
.
Cierra la ventana que entra el viento,
ruge una voz en vendavales de silencio.
Cierra la ventana que entra nada,
me respondo susurrando al son del tiempo.
.
Minuto parado, instante eterno:
el que uso para cerrar la ventana
y coserme las palabras desde dentro
con hilo de tinta y vocecita de aguacero.
Momentos que a veces se vuelven cotidianos; los has retratado bellamente. Muy bueno, Alex.
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Muchas gracias, Carlos!
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Her mo so 🙂
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Gra cias, Poli!
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Wow!
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