A quienes están
Y llegó el día.
Durante la semana se habían alineado
todos los planetas. El universo escribió
en el horizonte más cercano, con tinta
índigo. El día olía a tierra y agua.
El petricor caló las ropas y el cuerpo.
Era el momento de engrasar las botas,
vestir el cuero y saltar hasta la mañana.
Era el momento de la cerveza sobre la ropa
y la batería marcando el eco. Era el momento
de celebrar la música y que bailaran todas
las estrellas de la galaxia.
Pero ni su voz marcó el compás,
ni la niebla empañó el día de pizza italiana
con trufa y brindis de las copas de vino.
Pues nada. Que me ha dejado el corazón con un hoyo de buen tamaño por donde bien cabe la frustración. ¡Muy bonito, Gemma!
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Gracias, Carlos.
Abrazo gigante.
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Me ha despertado nostalgia y ganas de repetir momentos preciosos. Un abrazo Gema
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Mil gracias, Vicky. ❤️🎈🎈🎈
Abrazos.
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Hermoso, amiga. Y nostálgico. ¡Un fuerte abrazo!
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Muchas gracias, querida Carla.
La nostalgia azota durante los meses de pandemia.
Abrazos.
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