Solo soy un conato,
un comienzo que ni acaba ni avanza,
porque, como su propio dueño indica,
solo es, no está;
desaparece sin palabras a su alrededor,
solo con tiempo.
Solo soy un conato,
un comienzo que ni acaba ni avanza,
porque, como su propio dueño indica,
solo es, no está;
desaparece sin palabras a su alrededor,
solo con tiempo.