Un vacío silencioso
estampa una madrugada
el retrato de una reflexión
pensamientos sentidos
que a la nada llevan
y de la nada vienen
Insomnio controlado
por una mente mentirosa
—o ingeniosa—
depende quién la mire
insomnio relajado
mientras latente
a la espalda
está esperando la agonía
de sentirse cansado
una vez más
Todo está al mínimo
nada es lo que era
nunca nada fue nada
Viviendo a la espera
de esa agonía
cayendo en pesadillas
y sueños
con sabor a caramelo
agridulce
sabiendo que cualquier cosa
es mejor
que estar despierto
o mejor dicho.
Cualquier cosa es mejor
que ser consciente
que mandar sobre ti mismo
que ver el tiempo correr
y saber que existe el aburrimiento