
Háblame de ese vuelo
o cómo el viento
atrapa tu monolítica
virtud hecha estrella.
Esculpe la memoria
de tus adoradores,
en la tierra
del sacrificio y
del sacrilegio.
Las nubes son hechos,
donde la historia
llueve a cántaros,
te sujetas testigo
del inmóvil vestigio
humano.
Te dejo con la voz
muda de antepasados,
qué habrá pensado
el escultor
que descubrió
el vuelo del águila.
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