Soñé que me amabas,
viniste y me amaste;
soñé que me abandonabas,
de mis encantos prescindiste;
soñé que mi interior conocías,
proclamaste “a la hoguera”.
Lo que quieras haz con tu vida,
nunca más bruja me llames,
es tu responsabilidad,
que siempre mis sueños,
hagas realidad.