Dulce de tres leches


Tus muslos huelen a fruta,

tus pechos a pan dulce

y de tus labios rebosa almíbar.

Esta gatita muere por beber

las leches de tus fuentes.

Esencia violeta


La nota musical 🎶La mostrándole la esencia violeta al herrero.

—La extraje para ti. Pensé que te sería útil.

—…

—Luego de haber invertido tanto creo que es justo que obtengas algo. Úsala con sabiduría.

—¿Desde cuándo puedes hacer esto?

—Desde siempre, ya sabes, mi padre domina el conocimiento y toda la ciencia.

—Y esta esencia, ¿la extrajiste de ti o?

—No, no es mía, sería redundante, las esencias son útiles cuando vienen de otros mundos.

—¿Y puedes hacer esencia roja?

—Bueno…

—¡No! Tranquila, olvídalo, no quiero eso ya en mi vida… Ahora que debo regresar solo, esta esencia violeta me será de mucha utilidad, me hacía mucha falta este complemento. Gracias 🎶La.

Gran dragón azul


El Gran dragón azul en su forma astral surca los cielos de Aergon.

¡Gracias!

Porque me encuentras
y me levantas
en mis peores momentos.

¿Qué haré cuando no estés?
Seguramente
lo que pensaba hacer…

Si ahora creo
en el cosmos
en la energía, 
es por ti.

A la distancia me ayudaste
más que los que están cerca
y aparentan redención.

Tu ayuda verdadera
me levantó.
Sin rodeos ni excusas
me ayudaste.

Por ti conozco el valor.
De ser herrero,
me convertiste
en guerrero.

Gracias a ti
volví a la vida
y tengo ganas
de volver a luchar.

Y «arde cual dragón 
hasta que mi vida se extinga»
no deja de ser mi lema.

Seguiré ardiendo,
solo que mi vida
va a tardar en extinguirse.
Porque ahora tengo tu energía. 

Hijos de Baphomet


«Baphometh, el arquitecto del Universo». Tinta sobre cartulina.

Si no saliste de una vagina:
no te parió tu madre,
te parió la ciencia;
por tanto,
la ciencia es tu madre,
porque estás vivo(a) por ella.

Y el padre de la ciencia y toda alquimia es él,
o ella, o «elle» como se dicen ahora;
porque este ser no tiene género.
Este es padre y madre a la vez,
como tú.

Y como hijo del padre de la ciencia
buscas la ciencia,
el conocimiento,
el caduceo de Hermes.

Porque de su vientre vienes,
y a su vientre quieres volver,
en tus deseos nocturnos
cuando tocas tus botones de placer
o los de otro, o los de otra.

Te calientas y no te quemas
porque no eres de madera.
No hay alfarero que te forme,
ni carpintero que te cure
porque eres de acero… quizás.
Pregúntale a un herrero
a ver de qué estás hecho.

Si lo reconoces,
tu xadre te espera
con los brazos abiertos
y con su vientre abierto también.

Pero si te repugna y quieres huir,
no te queda otra más que morir;
y nacer otra vez,
ya no de sangre
sino del Agua.

El llanto de Sariel


«Los polvos de Sariel», por Blacksmith Dragonheart

Cuenta la leyenda que Sariel era miembro del Ejército de los Siete Arcángeles. Sus labores eran sagradas y contaba con la gracia de Dios. Sin embargo, un día durante sus misiones, Sariel cometió su primer error. Al igual que otros ángeles, empezó a mirar al mundo humano y quedó deslumbrado por la belleza de las hijas de los hombres. Sin embargo, aún no había cometido pecado alguno.

Pese a ello, Sariel adquirió el hábito de observar el mundo humano cada vez que podía. Pero, a diferencia de sus congéneres, éste no se dedicó exclusivamente a observar a las hijas de los hombres. Pasó siglos humanos observando, poco a poco, los actos de los seres humanos. Contemplando sus avances, sus errores, sus amores, sus odios, sus pasiones, sus guerras, todas las facetas de todas las personas.

Fue entonces como, sin darse cuenta, Sariel empezó a contaminar su corazón hasta el punto en que dejó de ser digno del Ejército de los Siete Arcángeles. Se le impidió el acceso al ejército celestial e incluso llegó a ver la caída de los ángeles expulsados del cielo por mezclarse con las hijas de los hombres.

A Sariel no fue necesario expulsarlo del cielo, él decidió exiliarse en la luna para observar a los seres humanos con más detalle. Al estar más cerca, empezó a ser capaz de leer sus pensamientos, sentimientos y emociones. Allí fue donde Sariel entendió la maldad inherente del ser humano y su corazón se volvió completamente el de un demonio.

El demonio Sariel empezó a odiar a la humanidad por todas aquellas atrocidades que llegó a contemplar. Lo que más trastornaba su mente, que ya no era perfecta, era el hecho de poder leer los pensamientos de las personas mientras cometían los crímenes más execrables. Sariel vio engaños, mentiras, chantajes, sobornos, corrupción, abusos, vejaciones, violaciones, torturas, secuestros, asesinatos, genocidios y una larga lista de etcéteras.

Sariel vio más de lo que pudo soportar. Un día, en su impotencia y desesperación, decidió arrancarse sus hermosos ojos y pulverizarlos. Concentró en aquel polvo todo su dolor y la poca bondad que le quedaba. Soltó el polvo hacia el mundo humano, con la esperanza de que los remanentes de su anterior estado de divinidad ayudaran a la humanidad a corregir su camino. Pero esto no ocurrió, la humanidad había llegado a un punto en que los polvos de Sariel ya no podían surtir efecto alguno.

Para este punto, el demonio exiliado en la luna ya no podía ver los eventos del mundo humano, pero podía seguir oyendo los pensamientos macabros de la humanidad. Retumbaban en su mente los lamentos de una mujer violada, de un niño devastado por la muerte de sus padres en la guerra, las súplicas de secuestrados y prisioneros, los llantos de una madre que pierde a su hijo en un asalto. Esos sonidos lo alteraban, pero aún podía soportarlos.

Aun así, la curiosidad del ciego Sariel no tenía límites y siguió buscando, ahora de forma deliberada, seguir ahondando más en la miseria humana. Agudizó el sentido de oír los pensamientos humanos y se adentró en la maldad profunda que ocurre entre las sombras y que solo es conocida por sus perpetradores y sus víctimas. Fue demasiado para su mente el conocer los crímenes de guerra, los asesinatos y violaciones en vivo expuestos en la Deep Web, el tráfico de órganos y demás aberraciones humanas clandestinas de las que muchos, por suerte, no conocen.

Sariel no tuvo esa suerte, pasó años vigilando aquello, llorando sangre por las cuencas vacías de sus ojos. Hasta que, en un acto completamente premeditado para acabar con su sufrimiento, Sariel cometió un pecado imperdonable tanto para un ángel como para un demonio. Utilizó parte de las plumas de sus alas, que él mismo se arrancó al perder su condición divina, y empezó a construir una daga con ellas. Al ser un demonio, Sariel podía ser dañado por aquella arma. El exiliado, ciego y trastornado Sariel forjaba su arma mientras lloraba sangre sobre ella. La sangre brillaba como fuego hasta que, cuando ya no pudo soportar el sufrimiento que le causaba la vigilancia del mundo humano, se apuñaló a sí mismo en el corazón. Siendo este el único caso registrado del suicidio de un ser divino.

El Hado oscuro


«Gran demonio del Hado», tinta sobre papel bond. Por Blacksmith D.

Yin y yang.
Las técnicas orientales.
Y como en todo,
su lado oscuro tienen.

El rechazo lleva a la duda,
la duda existencial lleva a la soledad,
la soledad lleva a la desidia,
y la desidia a la psicopatía.

El hado oscuro te llama,
esta no es una guerra en las estrellas,
la primera guerra empieza dentro de ti.
Tú no lo quieres, pero te dejan solo.

Y en la soledad del alma
reside la oscuridad.
¿Para qué existes entonces?
¿Para que el héroe se vanaglorie?
Pero en el mundo real
los héroes no existen.

Es héroe el que más habla,
el que más rodeado está de gente
gobierna.
Y tú solo eres una sombra.
Eres el hado oscuro.

El oponente te ataca…
Si eliges vivir,
eres el malo.
El hado oscuro
está en ti.

Naciste en medio del odio.
No es tu culpa.
¿Mereces vivir?
No, te lo demostraron al nacer.

¿Por qué naciste?
¿Para ser asesinado?
¿Para que te suicides?
No.
¡Ponte en pie y dales guerra!

Si te acusan,
mejor que sea siendo culpable.
Porque ya estás cansado de ser acusado
sin haber hecho nada.

Elige el tema de la «Antología III»


ACTUALIZACIÓN: Hemos definido el próximo tema de la «Antología III»: Agua. Necesitamos sus sugerencias de hashtag para nuestra próxima convocatoria en las redes sociales. Pueden enviar su propuesta aquí: Tema para la «Antología III»: Agua

¡Hola a todos!

Gracias por sus sugerencias para el tema de la tercera antología anual de Salto al reverso.

Tras decidir el tema, se realizará una dinámica en Facebook, Twitter e Instagram para convocar a nuestros autores y seguidores a enviar obras para ser incluidas en la antología. Posteriormente, también se realizará una convocatoria temática para los autores del blog y autores externos que deseen participar.

Ahora, por favor voten por alguno de los siguientes temas:

https://saltoreverso.survey.fm/vota-por-el-tema-para-la-antología-iii

(Algunos formularios o encuestas no aparecen en la app de WordPress, favor de ver esta entrada en un navegador de celular o computadora).

¡Gracias por su participación!


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